sábado, 15 de abril de 2017

CAMPAÑA CONCIENCIACIÓN CIUDADANA





     Sería cosa buena que la Campaña de Concienciación sobre la Limpieza que ha emprendido recientemente nuestro Ayuntamiento diera sus frutos y viéramos, a no muy largo plazo, que se hace realidad una Alicante no más limpia, porque para eso hace falta bien poco, sino simple y llanamente, LIMPIA.

     Aunque la campaña citada incide en algunos de los aspectos que provocan el estado de suciedad de la ciudad, temo que esta no va a dar, por sí sola, resultados positivos . Al menos en ese sector en el que están situadas las personas que, por ejemplo, tiran las basuras fuera del contenedor o permiten que sus mascotas satisfagan sus necesidades fisiológicas (dicho de modo menos fino, cagar y mear) en cualquier parte excepto (¡qué casualidad!) en la puerta de su casa. 

     Quienes actúan de este modo, es evidente que conocen sobradamente que están llevando a cabo una mala acción porque, de ser beneficiosa para ell@s, no vacilarían en hacerlo en su propia puerta. 

     Es, por tanto, necesario que desde el Ayuntamiento se emprendan, también, acciones disuasorias, multando a quien infringe las buenas normas de conducta social. Seguramente se alzarán voces diciendo que al Ayuntamiento le mueve tan solo el afán recaudatorio, pero yo aconsejo a los responsables municipales que hagan caso omiso a la críticas, por tres razones , al menos: a)son menos los incívicos que los buenos ciudadanos y, por tanto, se beneficia a la mayoría; b) hay que demostrar que, aparte de estar continuamente peleándose, el tripartito responde a las necesidades de los ciudadanos y la limpieza es una de las más importantes; c)si desde el Ayuntamiento se hacen bien las cosas, cuando llegue la hora de elecciones, las personas que votan tendrán claro a quienes elegir.

     Mientras tanto, hay quienes han emprendido por su cuenta el camino de la campaña contra los malos ciudadanos, recordándoles con carteles bien expresivos qué cosas no se deben hacer.

     Ahora, como se suele decir, el Ayuntamiento tiene la pelota en su tejado y a quienes lo componen les corresponde actuar.



viernes, 14 de abril de 2017

¡ES TAN BONITA MI CIUDAD!



¡Es tan bonita mi ciudad!
Sus calles, llenas de verde,
en las que mi mirada se pierde…
a la que añoro en mi soledad.

Si cierto es que la esperanza
de verde viene vestida,
cuán grande será la mía
si, hasta donde la vista alcanza
el verde su mensaje lanza
de frescura y lozanía.

¡Es tan bello su contraste!
¡Tan bello!… si se compara
con los orines y “cacas”
que sobre las aceras destacan
mientras la oscuridad ampara
a los que en ella se cubren.

Yo, que quisiera otear en la lejanía,
debo fijar mi mirada en el suelo
para evitar, si es que puedo,
adoptar una “caca” como mía.
Porque ¡es tanto su esparcimiento!
Está tan plagada de ellas la calle
que no es raro que mi vista falle
y me encuentre, en un momento
con la mirada perdida,
el gesto brusco y violento
mientras, como puedo, intento
recuperar mi autonomía.

¡Si no fuera por el verde…!
¡Ay! No sé lo que de mí sería…
Entre tanto aparcamiento,
sin lugar de esparcimiento,
sin ninguna mejoría
que la limpieza me recuerde.

Más ya se sabe. Son de la ciudad los amos
ésos ciudadanos marranos
que, guardan en sus bolsillos las manos,
mientras sus perros van derramando
desechos y las calles ensuciando.
¡Y nadie hay, que les acabe multando!

¡Es tan bonita mi ciudad!
Sus calles, llenas de verde,
en las que mi mirada se pierde,
a la que añoro en mi soledad…



 
Seto de malvas en C/Padre Esplá,57

En una calle cualquiera, en un día cualquiera...